¿Por qué considerar un asesor externo?

Muchas veces me pregunté eso, ¿por qué una empresa, sea grande o pequeña, podría considerar trabajar con un asesor externo? Luego de trabajar poco más de veinte años en banca, un fondo global de private equity y con muchas empresas desde distintos ángulos, di el paso para convertirme en un asesor externo de empresas, más que de empresas, de empresarios pero finalmente, de personas. 

En todo este tiempo he aportado y puesto a disposición mi experiencia analizando empresas, interpretando sus números, sus finanzas, armando flujos de caja, estructurando financiamientos, identificando palancas de valor, valorizando negocios, analizando benchmarks; ayudándolos a negociar condiciones, realizar contactos, entre otros. Mucho de lo que se conoce como hard skills. Sin embargo, gran parte del tiempo me encontré siendo alguien quien podía escuchar e intentar entender lo que el empresario buscaba lograr o resolver, atender sus preocupaciones y aportar un punto de vista adicional o complementario, ayudándolo a evaluar alternativas y tomar decisiones.

Sus motivaciones van desde no tener el tiempo para realizar ciertas tareas o no tener el expertise profundo en aspectos que no forman parte del día a día del negocio o poder discutir con alguien, que hable su mismo idioma, sus planes, preocupaciones, objetivos e ilusiones, es decir servir de caja de resonancia. Encontré que a pesar de tener equipo, ya sean sus directores, gerentes o colaboradores, en ocasiones pueden sentirse solos.

En algunos casos se trata de ejecutar algún encargo o proyecto puntual, con un objetivo concreto que lograr o problema que resolver. En otros, es más bien acompañarlos en la dirección de sus empresas a lo largo del tiempo y aportar desde mi expertise, de manera más permanente una visión complementaria, siendo un punto de apoyo. Alguien en quien puedan confiar respetando siempre la confidencialidad que tanto valoran.

Espero seguir ayudando a las personas que dirigen sus empresas mientras tenga valor para aportarles. En próximas notas, repasaré algunos  alcances de los encargos que me han confiado, muchos de ellos se repiten de una u otra manera, pero la idea es compartir cuáles son los aspectos en los que buscan asesoría y cómo atender dichas situaciones o casos. 

De la misma manera si tu empresa necesita de nuestra ayuda y experiencia, puedes contactarnos para agendar una asesoría personalizada. ¡Sigamos creciendo juntos en 2022!

Texto por Jaime Espinoza